A veces hay cosas que se presentan difíciles de contar. Cuesta mucho, muchísimo. Y todo por el miedo al que hacía referencia en el último post.
Ese miedo a que algo te salga mal, porque nuca sabes lo que te puedes encontrar. Y es que no lo superas. Aunque sepas claramente cual va a ser la respuesta, aunque sepas todo lo que hay, sigues con el miedo a que la situación que estas viviendo se acabe. Pero claro, pensando bien, en algún momento debe acabarse. Ya sea para bien o para mal, pero debe acabarse. No puedes estar toda la vida haciendo lo que haces sabiendo que de vez en cuando no eres tu el que reina en la mente. Por eso llega el momento en el que tienes que tomar una decisión. Debes cortar con todo. Ya esta bien de daño. No puede seguir haciendote daño a ti mismo, y más cuando esta experiencia ya la has vivido. Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. La primera porque no sabe de lo que va, la segunda porque piensa que todo va a ser distinto, es por eso que no puede haber una tercera. Todo y que al principio vas de cabeza, porque vuelves a pensar que nada va a ser igual que todo es distinto. Pero nada, estas a punto de cruzarte con esa piedra. Debes tomar la decisión rápida: esquivo la piedra y la dejo estar e intento no volver a pasar por este camino o… paro mi marcha y me siento con esa piedra a verlas pasar. Decisión difícil. Otra de las respuesta podría ser quitar esa piedra del camino, hacerla desaparecer, aunque duela porque pesa, porque es una piedra muy bien puesta en ese camino, poro hay que quitarla para que no te haga daño. Ahora mismo no se que es lo que quiero, supongo que la piedra estará igual, quiere hacerme tropezar pero a la vez le gustaría que me sentara a su lado. En fin. Lo que no puede pretender es que me siente a su lado junto con mas individuos. Porque sinceramente, ¿hay alguien a quien le guste que le hagan daño? Si ese alguien existe no soy yo. Dicen que mas vale una vez amarillo que ciento colorao, pues sí, mas vale hacer el corazón fuerte y quitar esta piedra del camino que no estar en el bombo de ser afortunado y volver a caer.
(Laura Pausini – Carta)
Quiero decirte aquello que
No conseguí decir jamás,
Que he mantenido oculto en mí,
Por mucho tiempo ya.
Hay un amor que crece en mí,
Que no se como esconde,
Ahora te deseo junto a mí.
Quiero decirte sólo que
Tú sigues siendo mi alegria,
Cuando con ella estas así,
Mis celos son una agonía.
Por todo aquello que me das,
Aunque sin quererlo dar,
Esto te lo tengo que contar.
De cómo cuando tú no estas,
La soledad se mete en mí,
Y me doy cuenta que además
No me divierto ya sin ti.
En cambio si conmigo estás,
Este oscuro gris será
De colores con la vida que me das.
Y que difícil es
El hablarte de esto a ti,
Que de amor no te gusta hablar,
Ni conmigo ni sin mi.
Tal vez porque
Tienes miedo como yo
De una respuesta que
Pudiera abrir tu corazón.

domingo, 13 de agosto de 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario